El Teatro La Scala es uno de los atractivos más destacados de la ciudad de Milán. Así como uno de los lugares que mejor representa su enorme patrimonio artístico, pues el Teatro La Scala es el más importante de Italia y uno de los principales teatros de ópera de todo el mundo. Su historia, desde su inauguración en el 1776, ha estado marcada por la grandeza de su estética, sus obras y los legendarios artistas que pasaron por su auditorio. Durante sus más de dos siglos de vida, La Scala ha sido una parada casi obligatoria en cualquier viaje a Milán. En la actualidad, esto no ha cambiado y visitar el teatro, presenciando o no una obra, es una de las experiencias más recomendadas que hacer en Milán.
Nacido de un gran renacimiento
Lo cierto es que La Scala ya existía antes del 1776. El edificio era uno diferente, ubicado en otra parte de Milán y que sufrió un accidente que acabó destruyéndolo. En pleno siglo XVIII, con la ópera viviendo quizás su mejor momento y con Milán como una de sus capitales en Italia, no había tiempo que perder. Sobre todo porque además de un arte era un negocio.
Muchas personas de poder eran dueños de palcos privados en el primitivo teatro y reclamaron al duque de Milán una reconstrucción. En ese mismo año comenzaron las obras para crear un nuevo teatro. Para ello se escogió un nuevo lugar y se derruyó la iglesia de La Scala para construirlo en su sitio. De ahí que el teatro, finalizado dos años después, cogiera ese nombre.
Teatro La Scala: el teatro por excelencia
Con este renacimiento del Teatro La Scala, la entidad y el edificio dieron un salto enorme de prestigio en toda Europa, pues el interior del teatro era uno de los más impresionantes jamás construidos.
La inauguración del nuevo teatro marcó sus grandes ambiciones, teniendo como primera obra representada en su interior el estreno absoluto de ‘L’Europa Riconosciuta’ del gran Salieri.
En sus primeros años, el teatro compartió sus funciones de escenario de obras musicales con funcionar también como casino. Aunque esto era algo habitual en la época, pronto la importancia de las óperas y conciertos acogidos en el Teatro La Scala lo hicieron demasiado importante como para albergar otras actividades.
Entre los grandes artistas que trabajaron en La Scala están los directores Arturo Toscanini y Tullio Serafin, dos verdaderas leyendas. En cuanto a intérpretes, cualquiera considerado de los mejores de la historia ha pasado por La Scala, desde Maria Callas a Plácido Domingo pasando por Pavarotti. La lista de genios de la ópera en todos sus ámbitos es infinita, pues La Scala desde su nacimiento a hoy es un escenario ambicionado por cualquier artista de ópera y que sólo los mejores consiguen pisar.
Algunas de las mejores óperas tuvieron su estreno aquí, como Otello de Giuseppe Verdi o Madama Butterfly de Giacomo Puccini. Entre otras muchas.
Verdi y el Teatro La Scala
Muchas de ellas del maestro Giuseppe Verdi, uno de los mayores compositores de todos los tiempos y uno de los grandes personajes de Milán. Verdi mantuvo siempre una relación muy cercana con el Teatro La Scala, donde se estrenaron múltiples obras suyas. Juana de Arco, Otello, Falstaff, Nabucco… un gran número. Precisamente por la larga lista y la fuerte unión de Verdi con La Scala, soprende que nunca fuera el mismo el que interpretara sus obras en el auditorio del teatro. De hecho, Verdi no dirigió ni tocó ni una sola vez en La Scala. Y tenía una razón muy clara y tajante. Según Verdi, la orquesta del Teatro La Scala modificaba sus obras y hacía que sonaran peor.
El edificio
Exteriormente, el edificio del teatro es gris en todos sus sentidos. En color y en presencia. El lugar parece uno más, uno de los muchos que forman la calle. Desde fuera, uno cree que bien podría albergar cualquier espacio de funciones burocráticas. Es común que algunos viajeros duden de si han llegado correctamente. Ya que el contraste con las increíbles fotos que ven de su interior hacen dudar con fuerza que ese edificio pueda albergar uno de los teatros más bellos que existen. Pero sí, así es. No os desmotivéis por su aspecto superficial. En cuanto entréis será como estar en otro mundo.
Museo La Scala
El teatro cuenta también con un museo dedicado a la ópera, a sus personajes destacados y a la historia del propio teatro. Una visita que puede ser interesante para los amantes del género y los curiosos, pero menos para los que buscan ver y apreciar un lugar de interés fuera de la ópera.
El museo conserva algunas reliquias realmente intrigantes, como un mechón de pelo de Mozart o la máscara mortuoria de Puccini.
Lo más interesante de visitar el museo es que desde él se puede ver la sala del auditorio desde uno de los palcos. Con sólo eso, ya merece la pena. De hecho, las únicas formas de visitar el Teatro La Scala son o bien visitar el museo o acudir a alguna obra.
Horarios, precios y etiqueta
Para visitar el Museo La Scala y así el teatro, el horario es de 09: a 17:00 todos los días y la entrada tiene un precio de 7€.
Para acudir a alguna obra, el horario y los precios cambian dependiendo de la representación de cada noche. Además, en una misma obra, dependiendo del sitio que escojas, el precio puede rondar desde los 40 a los 500 euros.
Las entradas se agotan rápidamente. Tened en cuenta que es uno de los teatros más importantes del mundo y que hay mucha gente que tiene comprado su asiento por toda la temporada de cada año.
Para acudir a una obra es necesario vestir de etiqueta. Traje y corbata para hombres y vestido de gala oscuro para mujeres. Un apunte de interés es que no todas las obras lo exigen. Pero, aunque no lo hagan, por código de vestimenta todo el mundo acude de etiqueta.
