Actividades » Visita guiada del centro de Milán y de la Última Cena
3h y 30'
09:15
La visita a La Última Cena está garantizada pero las visitas al Duomo y al Teatro La Scala podrían no ser posibles si ese día se celebran eventos especiales en ellos.
El itinerario del tour en grupo no sigue el recorrido adaptado para personas con dificultades de movilidad
Visitaremos lugares de culto por lo que es necesario llevar pantalones largos, faldas hasta las rodillas y tener los hombros y el escote cubiertos.
Gracias a nuestra visita guiada del centro de Milán con acceso a la Última Cena, podrás conocer lo imperdible de esta increíble ciudad en una jornada. Si tienes poco tiempo a disposición o simplemente quieres disfrutar de una visita completa despreocupándote de todo, esta es la opción perfecta para ti.
Saldremos de nuestro punto de encuentro por la mañana y nos dirigeremos hacia el Castello Sforzesco, el maravilloso castillo del siglo XIV situado en el corazón de la ciudad y rodeado por el elegante Parco Sempione. El magnífico Castello Sforzesco, originariamente fortaleza de la familia Visconti, se convirtió sucesivamente en el palacio de la familia Sforza, quien gobernó Milán durante el periodo renacentista.
Admiraremos el Castillo desde el exterior y sucesivamente nos desplazaremos hacia la catedral de Milán. El Duomo de Milán es uno de los ejemplos más espléndidos de estilo gótico. La Catedral hospeda en su fachada más de 3.200 estatuas.
Tras la visita del Duomo nos dirigeremos hacia el Teatro La Scala, pasando por la galería Vittorio Emanuele II. También conocida como el «salón de Milán», se trata de una espléndida galería comercial cubierta por bóvedas de cristal.
Entraremos en el Teatro La Scala, donde podremos admirar uno de los auditorios más famosos al mundo. Muchas obras de ópera de los compositores Verdi y Rossini se han estrenado en esta sala.
Dulcis in fundo alcanzaremos la iglesia de Santa Maria de las Gracias, para admirar la famosa pintura mural de la Última Cena de Leonardo da Vinci. Se trata de una obra única, considerada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. El fresco se encuentra hospedado en una de las pocas paredes del refectorio de la iglesia sobrevividas a los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial. Los eventos históricos y la delicada técnica pictórica empleada han arriesgado la conservación de esta obra maestra. Hoy en día las entradas son limitadas y se agotan con meses de antelación. Admirar la Última Cena es una experiencia única que no puedes perderte.