El Lago de Como, situado en Lombardia, es el tercer lago más grande de Italia (después del Lago de Garda y el Lago Mayor) y el más cercano a Milán. También llamado con su nombre en latín, Lago de Lario, este lago es considerado uno de los lagos más profundos de Europa gracias a sus 416 metros de profundidad. El lago está compuesto por tres ramos: el de Lecco, el de Colico y el de Como.

Aunque sea el más pequeño de los tres lagos de la región, no tiene nada que envidiarle al Lago de Garda y al Lago Mayor. Gracias a su clima temperado y húmedo, el lago cuenta con una rica y vasta vegetación. Su flora nos regala escenarios idílicos, como en un Jardín del Edén.

La belleza y paz del lago han hecho si que muchos exponentes de la alta sociedad a lo largo de los siglos decidieran establecer aqui sus residencias estivas. También hoy en día son muchos los personajes del jet-set internacional que han decido adquirir una propriedad.

No nos tiene que sorprender que el Lago de sea un destino exclusivo tan popular. Al llegar se nos para delante un escenario bucólico. Increíbles villas asomadas al lago, rodeadas por una rica y paradisíaca vegetación con al fondo los Alpes.

Si os encontráis en Milán os recomendamos visitarlo. Milán y Como se encuentran solo a 50 kilómetros de distancia. Sin embargo, no podrían ser dos lugares más distintos. Viniendo de la caótica Milán, la paz y el encanto del lago será impactante.

¿Qué ver en el Lago de Como?

Como

La ciudad que da el nombre al lago es la localidad perfecta en la que alojarse si tenéis pensado dedicar más de una jornada al lago. Fundada por los romanos en el siglo I a.C, Como destaca por la belleza de su centro histórico y por la importante producción de seda. Merece la pena dedicar media jornada a esta importante localidad. Desde Como podréis trasladaros facilmente a otras zonas importantes del lago.

Con la funicular Como/Brunate podréis disfrutar de las vistas de la ciudad, de los Alpes y del Lago desde el pueblo de Brunate, situado a 715 metros de altura.

Brienno

Brienno es unos de las localidades menos turísticas del lago y se encuentra muy cerca de Como, a solo 17 kilómetros. El pueblo de Brienno es uno de los más pequeños de la zona. Cuenta con menos de 500 habitantes.

Si tenéis pensado un itinerario por los pueblos del lago, una parada en Brienno debería ser obligatoria. Los edificios y las calles de Brienno se asoman literalmente al lago, como si de un momento a otro pudieran caer en él.

Tremezzo

La ciudad de Tremezzo es de las más populares de la zona. Esta elegante localidad es meta de turismo de lujo, gracias a las muchas villas que se encuentran en la ciudad. Entre las villas destaca Villa Carlotta, una impresionante residencia situada frente el lago del siglo XVII. No podéis perderos su impresionante jardín botánico que ocupa 70.000 mq de superficie.

Mennaggio

Otra meta muy famosa es la ciudad de Mennaggio. De dimensiones más grandes respecto a los anteriores pueblos, Mennaggio aún conserva su estructura medieval y cuenta con un centro histórico colorido y pintoresco. Además, la ciudad cuenta con un panorámico paseo peatonal que bordea el lago, desde el que podréis admirar el panorama.

Varenna

Varenna es un pequeño pueblo de pescadores costruido entre la montaña y el lago. El resultado es un pueblo lleno de encanto compuesto por pequeñas calles empinadas que, desde el centro histórico, nos llevan practicamente dentro el lago.

Bellagio

Bellagio es la localidad más emblemática de la zona. Rodeada casi a 360 grados por el lago, Bellagio se encuentra en la franja de tierra en la que se unen los ramos del lago de Lecco y de Como. Elegantes villas y edificios adornan las calles empinadas que llevan a su elegante centro histórico. Gracias a su encanto y a su elegancia, Bellagio se ha convertido en la principal meta del jet set internacional.

Cómo llegar al Lago de Como desde Milán

Llegar al Lago de Como en coche

Llegar al Lago de Como desde Milán no es complicado. Con el transporte público es posible alcanzar Como, Lecco y Colico en muy poco tiempo y a un precio realmente conveniente.

Sin embargo, para este tipo de excursiones en las que los paisajes son lo más llamativo de la experiencia, vale la pena ir en coche. En el trayecto disfrutaréis de las vistas y sobretodo, al moveros por los pueblos del lago, no deberéis estar pendientes de los horarios del tranporte público.

Si no viajáis en coche o no queréis alquilarlo, podréis reservar un transfer desde Milán hacia el Lago de Como y viceversa. El conductor privado quedará a disposición a lo largo de todo el día y os llevará de vuelta a Milán.

Llegar al Lago de Como en tren

• Desde Milán Stazione Garibaldi podréis tomar el tren directo hacia Como San Giovannni (en la parte occidental del lago). El trayecto tiene una duración de 40 minutos y el precio del ticket es de 4’80 euros.
• Desde la estación de Milano Centrale podéis llegar a Colico, en la parte norte del lago. El viaje es directo, se tarda una hora y media y cuesta 7’30 euros.
• Desde Milán Stazione Garibaldi podéis tomar el tren directo hacia Lecco, en la parte oriental del lago. El ticket cuesta 4,80 euros y el viaje dura unos 40 minutos.

Una muy buena alternativa para visitar los pueblos alrededor del lago es tomar uno de los muchos barcos que cruzan el lago conectando las principales localidades. Podréis moveros comodamente y mientras tanto disfrutar de un viaje panorámico.